La evolución de las ventas de sus consolas ha permitido a Nintendo esquivar la crisis económica y mejorar sus resultados en el año fiscal 2008, que finalizó en marzo. Concretamente, el beneficio neto del fabricante japonés subió un 8,5%, hasta alcanzar un récord sobre los 279.090 millones de yenes (2.127 millones de euros).
El resultado neto por operaciones de Nintendo subió también un 14% hasta los 555.263 millones de yenes (4.231 millones de euros) y sus ventas aumentaron un 9,9%, hasta los 1,84 billones de yenes (14.020 millones de euros), ambas cifras récord para el fabricante.
La razón está en el aumento de las ventas de su consola portátil DS, de la que ha vendido desde su lanzamento 101,78 millones de unidades, el doble que su rival más directo (la PSP de Sony), y de la Wii, que lleva acumuladas ventas de 50,30 millones de unidades, según un comunicado de la propia compañía.
Además, para el actual ejercicio fiscal, que finaliza en marzo de 2010, la compañía prevé aumentar su beneficio neto el 7,5% interanual hasta los 300.000 millones de yenes (2.289 millones de euros), debido en parte a un previsto debilitamiento del yen frente al dólar.
En este sentido, Nintendo ha hecho alusión en sus cuentas anuales a la crisis económica global, pero considera que el sector de videojuegos no se ha visto tan "impactado", y renovó su objetivo de conseguir que todos los miembros de un hogar tengan su propia consola, en lugar de tener uno sólo de estos dispositivos por familia.
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